"Los Silmaris tenían la forma de tres grandes joyas. [...] Tenía la apariencia del cristal de diamante y, sin embargo, era más inquebrantable todavía, de modo que ninguna violencia podía dañarla o romperla en el Reino de Arda. [...] Y el fuego interior de los Silmarils lo hizo Fëanor con la luz mezclada de los Árboles de Valinor, que vive todavía en ellos, aunque los Árboles hace ya mucho que se han marchitado y ya no brillan. Por tanto, aun en la oscuridad de las más profundas arcas los Silmarils resplandecían con luz propia, como las estrellas de Varda [...]" El Silmarillion, p.74,J.R.R.Tolkien
Y más allá de la vista de Mandos, dónde ni aún los más sabios se atreven a imaginar que nos espera, sabemos que Ilúvatar nos espera a sus hijos que no quedamos atrapados en los círculos de este mundo.
6 comentarios:
Ole, ole, y ole tú :D
Un besazo
Hay veces en la que la vida misma nos da escalofríos al ver cómo nos la juega. La vida y la muerte en dos post, tan seguidos, como un mazazo.
Un abrazo fortísimo, mi niña. Más no puedo ofrecerte, pero mi cariño lo tienes entero contigo.
:*
Un bezote hermosa, y arriba el ánimo eh? sé que es difícil pero también sé que podrás :*
Un abrazo inmenso guapetona, más no puedo hacer, pero estoy a tu disposición si lo necesitas.
Un besote.
Y más allá de la vista de Mandos, dónde ni aún los más sabios se atreven a imaginar que nos espera, sabemos que Ilúvatar nos espera a sus hijos que no quedamos atrapados en los círculos de este mundo.
Y allí, por fin, somos.
El Don de Eru es un don amargo, especialmente para los que se quedan que han de sufrir la pérdida del ser querido. Un besote y ánimo!!!
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