miércoles, 28 de noviembre de 2007

Karma ... o algo así

En esta vida, en mi opinión, todo lo que hacemos, todos nuestros actos, nuestras decisiones, conllevan unas consecuencias, buenas o malas, pero ahí están. LLamemoslo como queramos: causa - efecto, estímulo - respuesta o, como decimos en educación, acción - reacción. Cada una de las acciones o decisiones que tomamos en nuestra vida, van a dejar una huella, van a tener unas consecuencias. Y esas van a influir con total seguridad en los siguientes acontecimientos de nuestra vida. Creo que a ésto es a lo que mi gran amigo Cebadilla (que es un genio y, por cierto, VISITAD SU BLOG, INSENSATOS!!!) llama karma (corrígeme si me equivoco). Supongo que ésto es algo así como aquello que dicen nuestros mayores acerca de que si haces maldades, mal te será devuelto y si haces cosas buenas, cosas buenas te pasarán (aunque la verdad es que ésto a mí me suena a "discurso religioso" ya que, después de todo, vivimos en una sociedad occidental tremendamente marcada por el pensamiento y las creencias del cristianismo y su visión acerca del bien y del mal, pero es sólo una opinión mía). A lo que iba es a lo del karma, a esas consecuencias de nuestras acciones. Porque la verdad es que aunque estoy, o al menos siempre he estado, de acuerdo con la teoría de "bien conlleva bien" y "mal conlleva mal", cada día que pasa me voy desilusionando un poco más sobre ello. ¿Que por qué? Porque llevo siendo "buena" toda mi vida, haciendo de todo por la gente que me lo pide, ayudando a quien lo necesita, en definitiva, perdiendo el culo por los demás, hablando en plata, y a cambio, lo único que recibo son palos, palos y más palos. No es justo. Intentas hacer hacer siempre las cosas de la mejor forma posible y lo único que recibes a cambio son traiciones, deslealtades y puñaladas por la espelda. No es justo. Y me gustaría decir que no me importa, que sólo con saber que he hecho las cosas de la mejor manera, de acuerdo a mis principios, a mis valores y a mi forma de ser, me basta. Pero no es cierto. Sí me importa. Me importa porque tembién me gustaría recibir parte de lo que yo doy de vez en cuando. Podeis llamarme egoista si quereis, pero es la pura verdad y, seguramente, en el fondo, sea algo que le pase a todo el mundo.
Si lo bueno atrae a lo bueno y lo malo a lo malo, entonces yo he debido de ser malísima malísima de verdad.
Estoy harta de eso, de verdad. Pero lo peor de todo es que encima soy tan imbécil y tan tonta que no espabilo, sigo siempre haciendo lo mismo, pierdo el culo por quien sea que me necesite en ese momento. Y luego ...
Así que me gustaría saber si alguien sabe cómo se puede solucionar ésto. Porque me vendría muy bien saberlo, a ver si así espabilo.
Silmaril, con un mal día

2 comentarios:

Anónimo dijo...

¡Semiprima! ¡Encontré tu blog! Un placer leerte, seguiré haciéndolo desde ahora :D:D

¡En la mereth te eché en falta! ¿Por qué no viniste? BUAHHHHHH

Silmaril dijo...

¡Semipri queridaaaaa! Qué ilusión me hace verte por aquí, espero verte más ...
Joooo, no me recuerdes lo de la mereth que me siento fatal ... y más leyendo todas las cosas maravillosas que dicen de vosotros :(
Me sentó fatal no poder ir, porque me hacía tremenda ilusión porque os echo muchísimo de menos pero "la pela es la pela" y mi econocmía estaba totalmente sumergida ...
Pero prometo que, si volveis a hacer otra (porfa, porfa, porfa) no me la perderé :)
Muchos besosssssss