Redecorando vidas

No sé si será mi impresión o qué, pero últimamente me parece, cada vez más, que estamos en una etapa de cambios. Y no me refiero a grandes cambios colectivos, que también, sino más bien a todos los cambios individuales, ya sean grandes o pequeños, que estoy viendo se están produciendo en la gente de mi entorno, en conocidos e incluso en mí misma.

Algo está pasando para que tantos estemos cambiando nuestras vidas, y parece contagioso. Se está extendiendo rápidamente. Es como una especie de "crisis individual global", como si todos nos hubiésemos puesto de acuerdo para, de manera simultánea, meditar acerca de nuestra vida, de nuestros logros, de lo que soñamos conseguir o de lo que no hemos conseguido. Hacemos un profundo examen de conciencia, reflexionando acerca de lo que ha sido nuestra vida hasta este preciso instante ... y parece que, quien más y quien menos, todos estamos disconformes o a disgusto con algo, o queremos o necesitamos algo que no tenemos. Y hemos decidido dar un giro a nuestra vida, cambiar aquello que desentona, pasar página.

Pasar página. Igual que cuando leemos un libro. Después de todo, eso es lo que es nuestra vida: un libro. Un libro del que nosotros mismos somos autores, que vamos escribiendo diariamente con nuestros actos, nuestras decisiones, nuestros miedos, nuestras inquietudes y deseos ... Una obra viva. Una obra que cambia, que evoluciona. Una historia con mil pequeñas historias dentro.

Pero, al igual que en los libros, esas mil intrahistorias no pueden permanecer abiertas. Hay que ir cerrando esos capítulos para que la trama central pueda seguir adelante, para que pueda crecer y desarrollarse. Son etapas que se acaban, fases que terminan, ciclos que se cierran.

Y aunque no sepamos qué es lo que nos vamos a encontrar en el siguiente capítulo, sabemos que tenemos que empezarlo. Y en esa posición es donde ahora mismo nos encontramos muchos: empezando capítulos. Así que, a todos aquellos que estáis pasando página, empezando nuevos proyectos, nuevas aventuras, en definitiva, redecorando vuestra vida, como yo, mucha suerte.